de color vacío y tactos transparentes,
la noche se volvió trago amargo,
seco y frío como la muerte polar,
seco y frío como la muerte polar,
áspera como el abandono,
pero al abrir los ojos, ella,
con sus labios sin palabras,
con su piel de eterna primavera,
estaba junto a mí, despierta,
regalándome su tiempo de alegría,
y ocupó de nuevo mis ilusiones
con su espacio infinito,
y la quise compañera
para que la vida fuese vida,
y me quedé para siempre
en el mundo de sus maneras.
¨Ella
© Ediciones Cambalache - Pokit in a pocket. chus alonso díaz-toledo.
© Ediciones Cambalache - Pokit in a pocket. chus alonso díaz-toledo.
5 comentarios:
Me gustaría ser ella. El poema es precioso.
Besos de la admiradora secreta.
Muy bonito chus.Besos cuidate.
Qué preciosidad de poema. Ella estará radiante con tanto amor en tus letras. Besos desde tu Madriz huérfano de ti.
Almudena.
Bonito bonito, como siempre. :-)
Elena
Tú poesía es tan tuya.
Besos desde el mismo continente.
Graciela
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